La costumbre de usarlo para la ceremonia religiosa se remonta al antiguo Egipto que luego fue llevada a Europa por los cruzados.

Otro origen de este accesorio de la novia nos dice, que tiempo atrás las futuras esposas llevaban hierbas aromáticas como tomillo y ajo para protegerse de los malos espíritus que pudieran interferir con la felicidad de los esposos, tales hierbas se sujetaban con otras hierbas y flores determinadas que llegaban a ser comidos por las novias; para según ciertos historiadores, obtener poderes afrodisíacos.

Los ramos de antaño eran enormes, cubrían casi por completo a la novia, éstos estaban sujetados con nudos hechos de listones y pequeñas flores, donde las cintas se arrastraban camino al altar.

Durante la edad media las hierbas usadas para los ramos eran los azahares, pues significaban pureza.

Hoy en día todo ha cambiado, desde el diseño del ramo hasta la cantidad de éstos, pues la novia puede portar hasta tres ramos durante la ceremonia; uno el cual es el principal y el que ella guardará como recuerdo de su enlace, otro el cual será dejado en la iglesia y ofrecido a la virgen como agradecimiento y con el objeto de pedir la bendición para el nuevo matrimonio, y finalmente el que será lanzado a las mujeres solteras durante la recepción, la afortunada que atrapa el ramo de la novia tendrá suerte y será la próxima en casarse.

El significado de algunas flores con que se elaboran los ramos:

Rosa Roja: Pasión.

Rosa Blanca: Pureza.

Girasol: Espontaneidad.

Flor de Guisante: Placer delicado.

Tulipanes: Amor.

Violeta: Fidelidad.

Cala: Elegancia.

Camelia: Honestidad, Virtud.

Margarita: Inocencia.

Fresia: Calma.

Gardenia: Alegría.

Gerbera: Pureza.

Gladiolo: Gracia.

Orquídea: Sentimientos sublimes.